1- Importancia del Origen y la Autenticidad del Vino
Nuevos parámetros más allá de los organolépticos entran en juego a la hora de elegir un vino. Si bien el origen, la autenticidad y los métodos tradicionales eran tendencias a galope, hoy son ya unos “must” absolutos. Al alza los vinos que reflejan una identidad marcada y definida, que muestran valores compartidos con el propio consumidor. Y es que la interrupción de la cadena de suministro durante el lockdown potenció la vuelta a los productos de origen local. Del globalismo al localismo.
2- Vino ecológico. Conciencia vinculada a un mayor bienestar
Una mayor conciencia con nuestro entorno natural y nuestro bienestar se traduce en una exigencia para tener en cuenta por elaboradores en el trato del viñedo, en sus métodos de elaboración, en la relación con sus proveedores y en la distribución de sus vinos. Así el consumidor apuesta por vinos ecológicos, o vinos bio, y de reducción de las emisiones de carbono durante la elaboración y suministro del producto. Del mismo modo, los vinos de menor grado de alcohol y los vinos sin alcohol ganan terreno.
3- Menor Cantidad, Mayor Calidad
Una de las derivadas de una mayor conciencia con nuestra salud es el cambio en las motivaciones de compra. Estamos alerta y atentos con los alimentos que consumimos. Así, el mundo winelover apuesta por una suerte de premiunización, buscando elaboraciones de calidad contrastada, en detrimento de elecciones más económicas y/o de mayor volumen. Menos, es más y mejor.
4- El Hogar como sede experiencial del vino
En lo social, las reuniones en el hogar con amigos y familiares suponen ya un nuevo “hub” para el mundo del vino. Y es que nuestras casas se han convertido en sedes de experiencias compartidas, donde catas de vino, maridajes y demás actividades relacionadas con el vino y la gastronomía han cobrado una especial relevancia.
Los maridajes se muestran más abiertos y se simplifican debido a una mayor versatilidad en nuestra gastronomía que busca la misma versatilidad en los vinos que acompañan nuestros platos.
5- E-Commerce. Comprar vino online
Las compras online se establecieron y vieron reforzado su protagonismo durante el confinamiento, que actuó como vector de aceleración de un cambio que ya estaba a las puertas. Si bien, las compras de productos como ropa y accesorios, electrodomésticos, electrónica o telefonía estaba asentada, no ocurría lo mismo con la alimentación y el vino. Sin embargo, estas categorías han crecido de manera exponencial. Así pues, la compra de vino online no es una excepción. A los nativos digitales, se han sumado los “seniors”, que forzados a la digitalización en un principio, se manejan hoy con mayor soltura.
Además de la oferta vinícola, los winelovers buscan un acompañamiento en la aventura del conocimiento. Son más selectivos, curiosos y quieren saber más. Es el papel de los elaboradores acompañarlos en este viaje de descubrimiento mediante plataformas que faciliten el contacto directo, resuelvan dudas y proporcionen contenidos que orbiten sobre lo didáctico y lo lúdico.
La búsqueda del bienestar y la salud apoyada en la tecnología, la conciencia ecológica, los productos de proximidad y la vuelta a lo tradicional y auténtico son ya nuevas realidades que perfilan las claves de una nueva manera de relacionarnos con nuestro entorno y lo que este nos ofrece. Y el vino, no es una excepción.