Vinyes de Can Sala

La familia Ferrer lleva más 18 generaciones produciendo vino en las tierras de Mediona (Penedès). Conocidos por ser la mitad de Freixenet, hoy 400 años después han querido poner en valor a todos sus precedieron recuperando sus históricas bodegas para elaborar vinos y cavas que reflejen la importancia del terroir y la personalidad de sus uvas. Por un lado, Finca La Freixeneda (S.XIII) que produce vinos únicos y por otro lado La bodega Can Sala (S. XIX) produce cavas de paraje. Vinyes de Can Sala es un cava de paraje calificado singular, por su coupage de parellada, que le aporta elegancia y finura, y xarel·lo de muy baja producción, ideales para permitir una larguísima crianza. Color amarillo intenso con buena presencia de burbujas y corona marcada. En nariz aromas secundarios y terciarios con recuerdos de fruta tropical y fruta madura, un poco de pastelería (levadura, pan) debido a la crianza de 60 meses. En boca es un cava amplio, equilibrado, con un retrogusto que nos confirma los aromas a frutas. Cava largo, nos queda el recuerdo en boca durante mucho tiempo.