La brisa del Atlántico: descubriendo 7 vinos emblemáticos

 

Bienvenidos a una nueva entrada de nuestro blog Cosecha Propia de Petit Celler, donde hoy nos embarcamos en un viaje sensorial guiado por la frescura de los vinos atlánticos


Hablar de vinos atlánticos sin definir y delimitar el término puede resultar algo confuso. Aquí lo entendemos más como una cuestión de influencia climática, con un régimen de lluvias relativamente importante y temperaturas que, en general, nunca son extremas. Éstos serían los efectos que la proximidad del océano Atlántico ejerce sobre el clima en unas latitudes también bastante concretas, que van desde la desembocadura del Lora, pasando por Burdeos así como los viñedos bajo su influencia en el norte de la Península Ibérica.

Al fin y al cabo, la isla de Lanzarote o la provincia de Huelva también tienen el Atlántico a cierta proximidad, ¿pero podemos considerarlos vinos atlánticos?

Generalmente hablamos de vinos atlánticos en relación a vinos más ligeros, con graduación más moderada, frescos y con un cuerpo más ligero. Suelen ser vinos con expresiones frutales menos opulentas, si los comparamos especialmente con los vinos mediterráneos o incluso continentales, que a menudo traen recuerdos a fruta más fresca, menos maduras

El efecto del clima, menos caluroso y más húmedo, no favorece tanto la maduración de la fruta, produciendo uvas más ácidas, menos maduras, características que pasarán al vino, con menor graduación alcohólica a la vez que más estilizados, nerviosos, donde destaca su verticalidad y con buenas acideces.

En estos momentos donde, por lo general buscamos vinos más ligeros, con menos cuerpo y menos grado alcohólico, los vinos atlánticos no sólo están de moda, sino que su estilo natural se impone a la hora de elaborar los vinos de zonas más cálidas y que tradicionalmente han representado un estilo totalmente opuesto. Pero esto son “higos de otro costal” y hoy queremos proponerte unos vinos atlánticos que cubren la geografía nacional y que te ayudarán a descubrir la esencia de estos vinos que llamamos atlánticos.

 

1) Godeval: la pureza del Godello

Comenzamos nuestro recorrido con Godeval, una marca sinónimo de calidad y pionera en la revalorización de la uva Godello. Desde las laderas pizarrosas de Valdeorras, este vino nos llega con una historia de superación y una calidad que lo ha posicionado entre los mejores blancos de España. Con un perfil mineral y notas de fruta madura, Godeval es un vino versátil que acompaña desde aperitivos hasta platos más elaborados.

 

 

2) Pazo das Bruxas: el encanto de los Albariños

Siguiendo la costa llegamos a Pazo das Bruxas de Pazo Torre Penales, un albariño de la D.O. Rías Baixas que rinde homenaje a la naturaleza y la mitología gallega. Su nombre evoca leyendas de brujas y conjuros que, como el vino, forman parte del encanto de esta tierra. Fresco, aromático y con un equilibrado acidez, es un claro reflejo de la tipicidad de la uva Albariño y su terruño.

 

 

 

 

3) Paco&Lola: la personalidad del Valle del Salnés

Paco&Lola es sinónimo de modernidad y rebeldía en el mundo del vino. Con una imagen desenfadada, esta marca ha conquistido paladares ofreciendo un Albariño con carácter y una acidez refrescante. Sus viñedos, ubicados en el corazón del Valle del Salnés, son el origen de un vino que seduce por su frescura y su perfecto balance entre fruta y mineralidad.

 

 

 

4) Attis: la armonía de la tradición y la modernidad

En Attis, la tradición y la modernidad se dan la mano para crear vinos de inconfundible personalidad. Sus vinos son el resultado de un meticuloso trabajo en viñedos propios, donde la uva Albariño es tratada con el máximo respeto. La bodega, regentada por una familia con profundo arraigo en la viticultura, produce vinos que son un reflejo fiel de su paisaje, con toques salinos que nos hablan del mar cercano.

 

 

 

5) Cunquiero: la expresión del Terroir

Cunquiero es otra joya de las Rías Baixas, un vino que nace de la conjunción de suelos graníticos, un microclima único y la pasión por la viticultura. Su Albariño es un vino de parcela, que destaca por su pureza y elegancia. Con notas de frutas blancas y una marcada mineralidad, cada botella de Cunquiero nos habla de su terroir con una claridad que solo los grandes vinos pueden transmitir.

 

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6) Sangarida Mencía: la esencia de la Ribera Sacra

Finalmente, nos adentramos en la magia de la Ribera Sacra con Sangarida Mencía, un vino tinto que proviene de viñedos situados en vertiginosas terrazas que se asoman al río Sil. La uva Mencía, autóctona de estas tierras, se expresa aquí en su forma más pura, ofreciendo un vino de intensos aromas florales y frutales, con una acidez viva y taninos suaves. Sangarida Mencía es una oda a la tradición vitivinícola de la zona, una que se ha transmitido de generación en generación, manteniendo intacto el respeto por la naturaleza y el arte de hacer vino.

 

ECO
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No podemos tampoco olvidarnos de los txacolies de Hika.

 

7) La Frescura de Hika en cada Gotim

Los txacolis de Hika brotan como joya de la D.O. Getariako Txakolina, portadores de una frescura inigualable. Cada botella es una sinfonía de sabor que evoca los verdes paisajes vascos. La magia de Hika radica en su perfecto equilibrio entre acidez y fruta, un verdadero placer para el paladar. Descubre la pasión y el arte que cada copa de txacolí Hika desvela.

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Cada uno de estos vinos atlánticos es un testimonio vivo de sus raíces, un reflejo de la diversidad y riqueza del territorio. Desde el mineral Godeval hasta el floral Sangarida Mencía, pasando por el fresco Pazo das Bruxas, el vibrante Paco&Lola, el equilibrado Attis y el elegante Cunquiero, todos ellos nos invitan a explorar las diferentes facetas de estos vinos atlánticos.

 

Esperamos que este pequeño recorrido por los vinos del Atlántico les haya inspirado a descubrir o redescubrir estas maravillas enológicas. En Petit Celler, nos apasiona compartir con ustedes la historia y las características que hacen de cada vino algo especial. No duden en visitarnos para conocer más y, por supuesto, para llevarse una botella de estos tesoros gallegos a casa.

 

¿Cuál de estos vinos atlánticos te gustaría probar primero? ¡Salud y buen vino!